25 junio 2006

Mi primera experiencia con Michael Haneke: Funny Games.


Michael Haneke es un director del que había oído hablar mucho, ya que es uno de los que habitualmente ganan premios en festivales de cine como Cannes o Venecia. Sus películas muestran a personas normales, a las que les ocurren sucesos aparentemente cotidianos que dejan en evidencia la oscuridad del alma humana, y de cómo se enfrentan a situaciones que les superan. Al menos eso es lo que dicen.

Precisamente esta semana me he grabado un dvd con la filmografia de Haneke, del que no había visto nada. He comenzado por Funny Games, ya que Benny´s Video me parecia demasiado "experimental y primeriza" para empezar.

Funny Games es una película del año 1997, en la cual una família llega de vacaciones a una casa, y de cómo la aparición de dos jóvenes vecinos les mete de lleno en una espiral de violencia y pesadilla. Los jóvenes, aparentemente educados y corteses, irrumpen en la vida de la família pidiendo unos huevos. Tras romperse, los piden de nuevo, y ésta vez en otro accidente es el teléfono movil el que se estropea. La familia, algo inquieta, les da los huevos de nuevo para que se marchen, pero los chicos que no entienden a qué viene tanta antipatía de repente, obligan al marido a que los eche por la fuerza, momento que utilizarán para comenzar un juego macabro donde con total naturalidad y desprecio, humillan a la familia tan sólo para entretenerse o divertirse.

Y la verdad, me ha decepcionado un poco. Me habían comentado lo cotidiano y natural de sus situaciones, y que precisamente por eso resultaba todo más angustioso o perturbador...Pero no ha sido así. Tras un comienzo interesante y desasosegador, la película pierde fuelle con unos tiempos muertos excesivos y unas escenas alargadas que me parecieron demasiado obvias por lo pretencioso del resultado final. Son dos horas largas a la que le sobra una hora al menos, ya que tiene un par de giros inesperados que apenas soprenden porque la cinta se pierde en mostrar (fallidamente, en mi opinion) esa sensación de total desamparo e impotencia de la familia, frente a unos desalmados que resultan aterradores precisamente por su parsimonia y tranquilidad inicial, sensación que se echa a perder cuando juegan los clichés de turno del psicopata ingenioso.

Después de quedarme algo frío con Funny Games, continuaré con La Pianista y Cache (Escondido), películas más…reconocidas “comercialmente”, para luego revisar El Tiempo del Lobo y finalmente Benny´s Video, para juzgar realmente si Haneke, como pienso de Lars Von Trier, ha sido el último bluff europeo.

18 junio 2006

Y ahora, unas reseñas de comics:

Marvel Knights: Spiderman, de Mark Millar y Terry Dodson.

Muy entretenido y espectacular. Mira que Millar me gusta poco cuando se pone en plan provocador "quiero ser Garth Ennis en lugar de Garth Ennis", pero hay que decir que cuando se trata de aventura a saco o entretenimiento sin pausa, es de lo mas interesante y adrenalitico.


La trama comienza cuando Peter se da cuenta de que han secuestrado a su Tía May. Mientras Spiderman va perdido, preguntando entre maleantes de poca monta y supervillanos conocidos, acaba acudiendo a pedirle ayuda a Norman Osborn, el Duende Verde original. Osborn no piensa ayudar a Parker, a no ser que le asegure de que va a entrar en un juego del que Peter apenas puede salir. A partir de aquí Millar se permite un carrusel de antiguos villanos, peleas espectaculares, y un ritmo que va in crescendo hasta un impresionante desenlace, con enorme guiño incluido en forma de puente. El secuestro de Tía May, aunque ya supiéramos que en realidad no iba a morir y que al final saldría por algún lado, le ha dado juego a Millar a pasear a toda la galería de villanos mas importante del trepamuros, con algunos cambios que no molestan demasiado (cambios de diseño de algunos personaje, como Electro y mas radicalmente, Veneno) y una sensación de "organización" que hacia falta, como se vio en la exitosa "Crisis de Identidad" del Univero DC, con los villanos jerarquizados para diversas tareas, mientras se dedicaban a fastidiar lo mas posible a unos y otros superhéroes, siendo mucho mas mortíferos y amenazadores.La orquesta de Harry Osborn, el Duende Verde, chirría un poco, ya que es algo forzada, pero el giro del nuevo Veneno, el destino de Eddie Brock, y algún nuevo diseño son detallitos que no molestan demasiado.

Y que decir de los Dodson en el dibujo, ayudados por Frank Cho. No veía tan "hombre araña", tan plástico y de goma a Spiderman, desde Steve Ditko o Todd MacFarlane. Planos cinematográficos, viñetas frenéticas, espectacularidad en las peleas y en los escenarios...Mary Jane preciosa y la Gata Negra muy divertida, es como si realmente Felicia siempre se comportara así, y es creíble. Los diálogos de los secundarios resultan naturales y ayudan a entrar en la historia, mezclando sencillez y seriedad pero sin llegar a resultar recargados o pomposos.
Y tiene giros en la historia que son realmente originales, como la recompensa de J. J. Jameson por la identidad de Spiderman, la subaste del simbionte Veneno entre los maleantes que se quieren hacer un nombre en el negocio, el asalto a “La Roca” por parte de Spiderman y la Gata Negra…hasta llegar a una conclusión impactante que emociona por la manera tan “actualizada” de contar una pelea que resulta épica simplemente por su ambientación.

Han sido doce números, un año, que hemos pasado bastante entretenidos y en ascuas, con un argumento sencillo pero efectivo, que ha conseguido que algunos nos reencontremos con Spiderman en una historia que no pretende nada mas que entretener de la manera mas digna y divertida, avanzando un poco más en la cronología de Spiderman pero con una evidente mirada a “los viejos buenos tiempos” que ha resultado refrescante y estimulante.

Lobezno, de Mark Millar y John Romita Jr.

A mitad de Spiderman, me engancho a esta en el tercer número por recomendación. Todo lo que a mi me parecía Spiderman, la gente me decía de este Lobezno. Y es verdad.


La Mano e Hydra como amenaza siniestra y real, Elektra, letal y atractiva, con reminiscencias a sus orígenes ninja, Nick Furia tan duro como tiene que ser, y aun así carismático como líder, un secundario de lujo. Y hablando de secundarios, que decir de la cantidad de guiños, homenajes y apariciones estelares que salen. Desde unos 4 Fantásticos que hacen lo que pueden para detener a Logan, a una visita a la Mansión X con toque de nostalgia incluido, a una visita al Helitransporte de S.H.I.E.L.D. con cámara de contención para Logan a lo Arma X...todo ello contado de una manera vertiginosa, como una montaña rusa, sin freno, sin parar...Logan desatado, en el sentido mas literal. Una situación tan aparentemente sencilla y poco original como el control mental, se vuelve pura dinamita si el controlado es Logan, y lucha contra la mitad del Universo Marvel.
Aparte de los ninjas de La Mano y los terroristas de Hydra, se introduce una nueva sociedad, donde el mutante El Gorgón es su agente más letal. Experto en artes marciales y telépata, resulta mortífero además con su mirada.

La historia, dividida en dos arcos de seis números, se puede resumir con sus títulos: Enemigo Público la primera y Agente de SHIELD la segunda. En la primera vemos a Logan convertido en una letal máquina de matar al servicio de La Mano, para luego, tras su captura y liberación del control mental, pasar a la acción desde el bando de los buenos, y dedicarse a la venganza contra los que le han manipulado.

La verdad es que este cómic, como historia de Lobezno, lo tiene todo. Ninjas, SHIELD, Elektra, villanos amenazadores, peleas espectaculares…hasta la aparición estelar de unos Centinelas en una de las más originales escenas de combate que recuerdo. Al final, por supuesto, la lucha definitiva entre El Gorgón y Logan, que cierra una historia que no ha dado ni un respiro durante el viaje. Y este viaje se hace tan intenso y entretenido que uno recuerda el motivo original por el cual lleva leyendo superhéroes tanto tiempo.

Y respecto al dibujo de Romita Jr., pese a lo rígido y simple que dicen algunos que se ha vuelto, me parece una magnifica elección. El entintado de Klaus Janson le da unas reminiscencias al Frank Miller de Elektra o Daredevil que es algo muy refrescante y apropiado para la historia. Incluso tenemos a una Elektra que se permite un paseo en ropa interior por la nieve, igual que hace años en el ya clásico “El Hombre sin Miedo”, de Frank Miller y John Romita Jr. precisamente. Una aventura recomendable y disfrutable para cualquier fan del mutante que es “el mejor en su trabajo”. Aunque su trabajo no sea agradable.

Hawkman: Vuelo Final, de Geoff Johns y Rags Morales.

Todo lo que me gusta de Geoff Johns en la JSA, sumado a un personaje con reminiscencias de la cultura egipcia...Una gozada.


En la JSA pasa lo que hace tiempo que ya no siento en el Universo Marvel (a excepción de las arriba mencionadas y Astonishing X-Men de Joss Whedon). Buenas historias de superhéroes, con ese sentido de la maravilla, con esa sensación de "conocer" a los personajes, casi como una gran familia a la que vas conociendo un poco más mes a mes. Una galería de personajes, prácticamente todos salidos de la Edad de Oro, o reciclados de la Edad de Plata, encajando historias personales y superheroicas que uno disfruta tan ricamente.

Y ahora llega este Hawkman, uno de los personajes más carismáticos del Universo DC, con su potente imagen visual y todo su enigmático pasado, más el indudable encanto de "lo egipcio". La relación de el actual Carter Hall con el príncipe egipcio Khufu, el espíritu reencarnado de Shayera en el cuerpo de Kendra Saunders, que no quiere saber nada de reencarnaciones ni de Carter, y un aroma a aventura clásica, casi a lo Indiana Jones, con países lejanos y exóticos, antiguas reliquias, mundos olvidados, y porque no, villanos de opereta que resultan inquietantes y divertidos a partes iguales.

Además, un invitado de lujo. Green Arrow, el original. Carter y Ollie nunca se han llevado bien, y eso lo se sin conocer el Universo DC más que tres años. Así que es una gozada ver los diferentes puntos de vista que tienen los diferentes héroes, y de cómo llevan los casos en los que les toca intervenir. Da una sensación de coherencia y de interconexión que luego se verá en mayores proporciones en Identity Crisis o en la ya clásica (pese a que aquí aún no se ha publicado) Infinity Crisis, y que permite ver que si un personaje tiene una forma de ser en una colección, lo es así siempre. Y Carter Hall, Hawkman, es algo arrogante y altivo, pero también emociona verlo sin su impresionante máscara como un humano normal, dejando atrás su linaje casi místico de faraón egipcio.Y Rags Morales, el dibujante, empieza a evolucionar de una manera evidente, mucho mas avanzado que en la JSA, acercándose a ese estilo "realista" que tendrá su apogeo en la ya comentada Identity Crisis. Otro ejemplo de cómic bien hecho y mejor disfrutado. Y el viaje acaba de empezar...

06 junio 2006

El traje de Superman en Returns: No hay color...

A lo largo de los años, y desde su creación, Superman ha ido creciendo en popularidad. En la actualidad, el primer Superhéroe es de sobra conocido. Podría decirse, incluso, que ha trascendido el propio personaje, convirtiéndose en un icono, en un símbolo, que todo el mundo reconoce.

En ésta ilustración podemos ver la evolución del traje del héroe a lo largo de los años. Se reconoce claramente el de su origen en los años 30, así como el de los años 50 y 60. El Superman pre-Crisis era algo más moderno, pero hasta los 80 y gracias al "Man of Steel" de John Byrne, Superman no tendría esa imagen brillante y poderosa por la cual todo el mundo lo reconoce. También aparece un Superman algo más "realista" por Alex Ross, pero recogiendo claramente el testigo dejado por Byrne.

Cuando llegó la Superman, La Película, Christopher Reeve, un desconocido de 25 años, se enfundó el traje del Hombre de Acero, y su imagen quedó asi:

Superman, en el cine, era también un símbolo, un icono, gracias al acierto de recoger la imagen tan bien definida en el comic. Realmente, dejando a un lado la interpretación de Reeve, ésta es la imagen de un superhéroe, consiguiendo transmitir su grandeza, tan sólo por traje y los colores utilizados.

Tras las películas y los comics de los 80, la imagen de Superman también cambió, ajustándose a los nuevos tiempos. Tras la famosa y polémica "Muerte de Superman" y su posterior resurrección, se aprovechó para probar nuevos diseños y uniformes. Así, un Superman con el pelo largo y otro de pura energía azul se asomaron por las páginas de los comics con desigual resultado.
Así, llegamos al siglo XXI, con una nueva película a punto de estrenarse, dirigida nada menos que por Bryan Singer, responsable de las acertadas X-Men 1 y 2 (como comento más abajo...). Tras las especulaciones y rumores, Brandon Routh, un desconocido de 26 años, será el que se enfunde de nuevo las mallas. A ver qué os parece:

Increible, verdad? Promete, y mucho. La S bien grande en el pecho, la capa roja y majestuosa, las botas altas...Una imagen , un símbolo. Mucho más que un simple actor con mallas azules.
Pues no. Esa imagen está retocada por un fan. Es Brandon Routh, es el uniforme de Superman Returns...pero parece que ESE no es el Superman de la nueva película.
Es ESTE:
Eh...Me lo parece a mi, o aquí no hay nada de símbolo, de icono, de superhéroe? Por qué yo solo veo a un chico con unas mallas azules hasta el cuello? Donde esta la S, dónde está la capa? Donde está, en fín, Superman?Así que no lo entiendo. Un actor que llena el uniforme, acertado en su edad y en su (falta de) popularidad, pero que no consigue transmitir la grandeza del primer superhéroe por un detalle como el fallido diseño del uniforme. Y es que, no hay color.Pero hay más. Resulta que esto de "Returns" viene porque continúa Superman II. A Bryan Singer "no le valen" ni cuentan Superman III ni Superman IV. En lo de la IV estoy de acuerdo, yo hago lo posible por olvidarla. Pero resulta que en la III, aparte de salir Richard Pryor, salía ESTE Superman:

Sí! Es el Superman "malo"! Y mirad el color de la capa y la S! Parece que Singer no ha "pasado" tanto de Superman III y ha cogido algo de lo poco que valía la pena de la película...Solo que Returns no es una peli de los 80 de Richard Pryor "en la que Superman aparece de vez en cuando". Sigo sin entender nada, porque si ese color era molon en el Superman sin afeitar y tirando cacahuetes, en el de ahora no queda nada bien.

Los fans lo tienen claro. La S, bien grande en el pecho:

Y los colores de la capa y el resto del uniforme, bien rojos y majestuosos. Porque el traje de Superman le hace a uno majestuoso, poderoso e impactante. Alguien a quien tomarse en serio...

O no está adorable?

Nota:Este artículo está escrito con toda la objetividad posible, aun estando pendiente el estreno de Superman Returns. Si luego en la peli resulta que sí que sale Superman como el icono y símbolo que a mi me parece que es, vendremos aquí a decirlo. Y no estoy condicionado por la imagen de Christopher Reeve. Aunque creo que la comparación va a ser inevitable para todos, y está claro quién va a salir perdiendo, he intentado hablar de Superman como imagen e icono social. Y Superman, lo queramos o no, pese a dibujantes y directores, siempre será recordado por su imagen en la primera e inolvidable película de Richard Donner, como el imponente e impactante icono cultural que es.


05 junio 2006

Problemas...

Blogger no me deja subir fotos. No puedo añadir al articulo anterior, ni escribir uno nuevo, que tenia bastantes para ilustrar el texto.

Asi que como actualización, he contestado a los comentarios del anterior post, que el debate está animado.

Y dejo un avance de lo que vendrá en cuanto pueda subir más fotos...

02 junio 2006

X-Men 3: La última...Y tan descafeinada.

Tras esperar una semana desde el estreno, ya que se me hacía difícil hablar de la película sin destripar nada del argumento (ojo, que ahora sí que lo hago) , me animo a escribir un comentario/reseña, ya que el debate que se ha generado en diversos medios ha sido animado e interesante por lo variado de sus opiniones y posturas.

Antes que nada, decir que esta tercera parte de la saga mutante en el cine ha cambiado de director. Tras el digno debut de X-Men y la espectacular X-Men 2, ambas de Bryan Singer, el cambio de director ponía nerviosos a numerosos fans, yo incluido, ya que Brett Rattner no inspiraba demasiada confianza tras las entretenidas pero simples Hora Punta 1 y 2, y la mediocre El Dragón Rojo.
Y hay que decir que todos hemos salido perdiendo con el cambio de director. En mi opinión, X-Men 3 no emociona, no mantiene en vilo como pasaba en las anteriores entregas. El mensaje social, aunque leve pero evidente antes, no se encuentra aquí, tan sól hay espacio para acción gratuita torpemente repartida y unos actores que apenas transmiten lo que sus personaje deben transmitir.

Intentando alejar el sentimiento de “lector”, algo difícil para los que hemos crecido con estos personajes, como película deja bastante que desear. O no, si tenemos unas expectativas de blockbuster veraniego de “pasar el rato” o “disfrutar de una película palomitera”. Pero la verdad, yo esperaba algo mas, ya que los mutantes podían (y daban, según las entregas anteriores) ir un poco más allá del mero entretenimiento vacío de emoción. Y emoción es lo que le falta a esta tercera parte. Una hora y cuarenta minutos es un tiempo bastante escaso para contar cómo afecta a la comunidad mutante el hecho de que haya una cura que elimine la “enfermedad” del gen mutante. Lo que podía haber sido un interesante debate sobre el impacto social de algo que puede eliminar una minoría social mal vista y perseguida, frente al derecho de no querer tomar esa cura y reivindicar los derechos a “ser diferentes”…Se convierte en una rápida sucesión de escenas de peleas, con un leve contenido político y social. Lo importante, parece ser, es meter a cuantos más mutantes mejor, para que el combate final resulte más espectacular. Lástima que cuando llega algunos ya hemos perdido interés en una trama simple y predecible.

Los personajes:
Uno de los fallos que se le achacaron a la primera parte fue, precisamente, que aun teniendo un reducido grupo de mutantes, no se desarrollara del todo a los más relevantes. Así, Lobezno era el que más presencia tenía, junto con Xavier y Tormenta. Hasta la segunda parte no se pudo profundizar en algunos, como Jean Grey, Rondador Nocturno, o incluso Mística y Magneto. Precisamente, los discursos de Magneto, la imagen de líder mutante frente a los humanos era mucho más amenazadora que en esta tercera parte, casi una sombra de lo que recordábamos.
Para ésta ocasión se ha eliminado a Rondador, y en su lugar ponen a la Bestia, como enlace diplomático entre el gobierno y la comunidad mutante. Es uno de los mejores aciertos, ya que el actor Kelsey Grammer, famoso por ser el Doctor Frasier, le da una elegancia y un carisma importante. Lástima que al final se desaproveche este “enlace político”, y la Bestia diga un par de frases antes de pasar a dar volteretas junto al resto.
Pícara también cambia, ya que de ser una inquieta e insegura mutante que está madurando junto a sus compañeros, pasa a ser una niñata insegura emocionalmente, con una insoportable rabieta creada por los celos, que la lleva a alejarse de Bobby (el Hombre de Hielo) y a querer tomar la cura. Si sus problemas mutantes son una maldición, no lo vemos. Y sobre el cambio que supondrá para su nueva vida el tomar la cura…tampoco lo vemos. Es uno de tantos personajes desaprovechados o mal desarrollados. Como Cíclope. Scott era el líder de la Patrulla X, y en la segunda parte sufre un trauma que le hace sufrir. Pero en esta tercera parte, sabiendo como sabíamos que Jean Grey iba a volver como Fénix, quizás era hora de pasar de ser un joven inseguro al hombre maduro que vemos al principio, capaz de encajar una pérdida y aún así mantener el liderazgo de los Hombres-X. No es así, ya que en una de las más innecesarias y estúpidas muertes del cine, Cíclope desaparece. No sabemos por qué, no sabemos cómo…sólo que Fénix, que ha vuelto con una oscura hambre (de energía vital, de sexo, de sangre? No lo explican!) lo hace desaparecer. Cuando alguien muere, ya sea en el comic, en el cine o en la literatura, aparte de la normal sorpresa, uno tiende a tener ciertos sentimientos. Pues nada de eso pasa ahora. Cíclope está, y luego no está. Y pasamos a otra cosa. Xavier, de ser un sosegado líder, abierto al diálogo, mentor en el que se puede confiar, es ahora un manipulador, un débil maestro que apenas puede infundir confianza en sus alumnos. Debilidad aprovechada por Magneto, que no duda en reclutar a Fénix y a cuanto mutante gótico-punkie se encuentra, con unos discursos que ya nos sabemos de memoria, de tan sobados y gastados. Ni siquiera Mackellen tiene esa fuerza en la interpretación, como si ya se hubiera cansado del personaje, y de rebote sea Magneto el que parece viejo y cansado. Coloso apenas tiene un par de líneas de diálogo, Moira Mactaggart lo mismo…Juggernaut me resultó gracioso, mejor de lo que esperaba, al tener una buena caracterización y ser interpretado como una caricatura. Introducen también a Kity Pryde, Gatasombra, con una acertada actriz y un par de buenas escenas para que se luzca. Y Calisto…Bueno, los que conocemos el cómic sabemos quien es Calisto. Porque en la película no sale. Y decir que sale Jamie Madrox, el Hombre Múltiple, también sería un eufemismo (es un actor, o un cgi?).
Los más evidentes y descarados cambios par el final. Hugh Jackman y Halle Berry ya son estrellas. Actores de prestigio que se pueden permitir pedir una millonada y tener el suficiente poder para reclamar más planos y más diálogos. Y los piden. Tormenta es la que sale ganando, ya que los momentos en que por fin se ven sus poderes en toda su plenitud hacen olvidar los momentos de “Soy Halle Berry, miradme actuar dramáticamente”. Que hay unos cuantos. Lobezno igual. No se quién habrá sido el peluquero de Logan ésta vez, pero la verdad es que cuesta tomarle en serio, si no esta gruñendo y trinchando por ahí con sus garras. Porque se permite un par de momentos dramáticos que sólo consiguen arrancar carcajadas del público. Hacía falta un líder para pronunciar esas palabras. Pero Xavier y Ciclo ya han desaparecido a esas alturas, y Jackman es una estrella que quiere más protagonismo. Pese a que en entrevistas decía que se alegraba de que fuera la última, y que ya no tendría que llevar “ese estúpido peinado”. Estos famosos…

La historia:
Una cura que permite eliminar el gen mutante. Magneto que quiere iniciar una guerra (por tercera vez!) contra los humanos antes de que ataquen primero. Fénix jugando a Jekyll y Hyde y la niña del exorcista todo a la vez, mientras hace un guiño a su primer papel el Hollywood y pide sexo salvaje. Amoríos fuera de lugar entre los nuevos mutantes. Mutantes que salen sólo para una escena…Diálogos insulsos que no emocionan para una gran traca final. Cuando Magneto levanta un GRAN puente durante el dia…Y lo deja caer cuando es de noche. Y es que, para la escena de la batalla final, los efectos especiales se notan menos en la oscuridad...
Pero vamos, que se monta una Royal Rumble mutante. Un todos contra todos donde Magneto demuestra su maestría jugando al ajedrez (manda a los peones primero...y los matan a todos? Que estrategia es esa?) y donde por fin Tormenta se pelea con Calisto, como todo el mundo esperaba. Ah, todo el mundo no? Es verdad, nadie sabe quién es Calisto, y el público “normal” se queda un poco igual al no pillar la coña. Así que tampoco se darán cuenta de que Kitty hace atravesar a Juggernaut el hormigón y lo materializa DENTRO, escamoteándonos una de las escenas más gore que hubiéramos podido ver en el Hollywood actual.

Consiguen cuatro jeringuillas con la cura, y en lugar de reservar alguna para la Fénix poseída, se las tiran a Magneto! Claro, como es un mutante de nivel 4, pues 4 jeringuillas. Y Fénix, como es nivel 5, pues por el c…Noooo! Que toca escena friki para los fans! Así que homenaje al comic tocan y se encarga Lobezno, mientras se le cae la carne a cachos y los vaqueros no se le arrugan. Emocionante? Yo me revolvía en la butaca, incómodo.

Tras hora y media de despropósitos, de llevar los persones de un lado a otro y no avanzarlos ni desarrollarlos, llegan los dos finales. Uno, donde desmienten toda la idea de la cura, al insinuar que es temporal y que la gente “curada” puede recuperar sus poderes, y otro, tras los créditos, como en una cutre película de Scream, donde en una escena así, a traición, te dicen “Que noooo! Que no ha muertoooo”. Y te quedas con la duda de si tendrán huevos de poner, para la próxima peli, a un actor de moda, que no sea calvo, y que en lugar de ir en silla de ruedas vacile a Logan jugando al baloncesto.

Si, ya se que Xavier en el comic puede andar en unos números y juega al baloncesto! Frikis…

Lo mejor: Me temo que tan sólo la versión original, los actores parecen un poco más serios que doblados al castellano. Y ciertos FX curiosos. Y no hay más. En general sabe a tan poco…Pero ey, y lo bien que nos hemos tomado todos las palomitas?